El amor logra lo que el rechazo no

Viví muchos años contando mis defectos, errores y desaciertos con la religiosidad de aquel que no se quiere a sí mismo. Ya había escuchado que aquello a lo que pones atención, se expande. Y así sucedió. 

Lleno de rabia luché y luché para exterminar esos defectos que no me gustaban y que, según yo, no me dejaban ser feliz. Como todo lo que se hace desde la rabia solo puede traer destrucción, pues caí abatido, con un sabor de frustración en mi boca y con mis defectos intactos, saludables y viéndome desde arriba con cierta lástima.

Fue entonces que dije: Y si dejo de pelear y empiezo a amarlos y a vivir con ellos? 

Si algo tiene el amor es que parece magia. Cuando empecé amarme con mis defectos y errores es que pude transformarlos. Y saben qué? Muchos de esos defectos no eran tales, sino cualidades que no estaban bien enfocadas.

Amemos.... aunque no sepamos cómo. 
Amemos... cuando menos queramos, 
Amemos... hasta que lleguemos a odiar lo menos posible.

Feliz vida.